“ Lo importante es transmitir formas fuertes, verdaderas, llenas de emotividad y armonía. Pues el arte debe producir algo más que un efecto visual, debe producir una reacción interior.”
Asdrúbal Colmenárez
1936-1968 - Inicio
Nace en Trujillo el 21 de agosto de 1936. Estudió varios años en la Escuela Industrial, la cual abandona para trabajar en la carpintería de su padre, César José Colmenárez. A temprana edad comienza a estudiar pintura en el Ateneo de Trujillo. En este centro cultural se encuentra con una tradición de acuarela impresionista. Termina impartiendo clases en el Ateneo y en las Escuela de Artes Visuales de Valera. En esos años se dedica a ser pastor protestante.
Su formación plástica inicial se centró en el paisajismo, hasta que entra en contacto con el artista chileno Dámaso Ogazo, enviado a Trujillo por el Inciba cuando era presidido por Simón Alberto Consalvi.
Así, entra en contacto con el expresionismo desde Nolde, Munch hasta Kooning y especialmente con la obra de Ben Nicholson, quien basaba su propuesta en objetos hechos por el hombre uniendo lenguajes plásticos antagónicos en un mismo plano.
Con los consejos que recibe de Dámaso Ogazo, decide irse a París en 1968. Un episodio importante en su evolución fue que había tenido la posibilidad de conocer en la casa de Guillermo Meneses y Sofía Imber una pequeña obra transformable de Jacob Agam.
Así, lo primero que le interesa al llegar a París fue indagar en una propuesta que se pudiera manipular.
(1969-1977) – Psicomagnéticos
“En los Psicomagnéticos utilizo la curiosidad, más o menos pronunciada del público, frente a los elementos suceptibles de ser manipulados. La obra existe activamente con la participación del público: al momento que se establece el diálogo entre participantes.”
Asdrúbal Colmenárez
Al llegar a París empieza a investigar con diversos materiales que le permiten la interacción a través de la fuerza real del magnetismo, gracias al juego con imanes y densidades diferentes de agua que le dan a conocer la fuerza real de esta atracción. Comienza a ejecutar una obra en madera, láminas de hierro delgadas, llamadas ferriflex, planchas metálicas y pinta el trabajo que titula los Psicomagnéticos. Serie que muestra en el Museo de Bellas Artes en 1976, en una exposición llamada Táctiles psicomagnéticos. En ellas se crea una real interacción entre el público y la obra, por la acción del rodamiento de las tiras que ponen en contacto directo al espectador con la pieza, develando juegos visuales o efectos ópticos al interactuar el color, la línea y el movimiento.
“Asdrúbal Colmenárez lleva sus proposiciones a un orden eminentemente participativo. Estamos ante un proceso fascinante, que pone literalmente en las manos del espectador una capacidad táctil de cambiar los puntos clave de la composición, con gran libertad de iniciativa. Colmenárez consiste en una revolución por la expansión creativa…”
Guevara, Roberto. Otro Alfabeto para la Vida. El Nacional. Cuerpo A. 22-4-1980
(1971-1978) - Alfabetos Polisensoriales
“Se trata de salir de los principios exclusivos de una cultura particular, transmitida por la enseñanza lógica y rigurosa de los adultos. Una de las principales características es su adaptación a diferentes lenguas. El principio es un verdadero cambio e intercambio.”
Asdrúbal Colmenárez
En esta obra lleva a los extremos la heterogeneidad de materiales que conforman el alfabeto de 26 letras, pues utiliza madera, plomo, plástico, maicena, arena, hierro, resortes, imanes y pintura, entre otros materiales. Esta obra fue presentada en el Museo de los Niños de Arte Moderno de París, en 1978. Y en la Galería de Arte Nacional (GAN), en 1980. Cada letra creaba sensaciones diferentes; la L, por ejemplo, estaba hecha de chirriantes cápsulas de maicena; la U con hojas de materiales pesados; la B era imposible de colocar en el lugar que le correspondía; la N se iluminaba completamente…
El alfabeto genera acciones en un determinado contexto, que busca retar y provocar la curiosidad, el ludicismo del niño, haciendo brotar una situación de creatividad pura. Involucra los sonidos, las sensaciones táctiles, los movimientos asociados azarosamente a cada una de las letras del alfabeto, permitiendo a cada niño crear sus propios códigos, al consentir la ruptura con la causalidad pedagógica.
“Alfabetos Polisensoriales, Táctiles Psicomagneticos y Psicografitierra son pretextos para estimular situaciones en las que el estimulador también es estimulado, en un proceso de intercambio psicológico…Es la socialización de la creación.”
D´Amico, Margarita. Alfabeto Polisensorial y otras Proposiciones sobre la Escritura.
Galería de Arte Nacional (GAN). 1980.
(1978-1980) - Psicograffitierra
“Sobre la superficie transformada al infinito, estamos tentados a pasar la mano, bien sea en un movimiento violento o dulce y acariciante; el gesto saca su impronta de la huella trazada en la materia, transformándose esta huella en una motivación para realizar otro gesto apto o incitar a la reflexión y a una repetición. Esta posibilidad de eliminar la huella dejada reconstituye otra, es un infinito viaje llevándonos al punto cero del objeto.”
Asdrúbal Colmenárez
Está inspirada esta obra en el graffiti callejero, a través de él, la sociedad reconoce sus capacidades creativas reprimidas, transformándose en una vía para encauzar esta necesidad. A través del acercamiento a esta realidad crea una serie con el magnetismo usado como pizarra. Instaura un efecto participativo que manifiesta la espontaneidad del grafitero que interviene los muros de una ciudad, a través de una superficie metálica cubierta de polvo de hierro imantado. En los Psicograffitierra, la interacción con el público se establece en el uso de sus manos y su cuerpo convertidos en pincel, es el cuerpo como instrumento creativo.
(1979-1985) - El Espacio como Problema
“Intento reconstruir el espacio fragmentándolo, al crear formas que se fragmentan y se ubican en varios sitios del espacio.”
Asdrúbal Colmenárez
Se inician en este periodo la acentuación en preocupaciones que son ejes de su trabajo plástico: el espacio y la percepción. El artista desea que el público sea consciente de la relatividad del espacio y por tanto de la subjetividad de la percepción. Estas estructuras alzadas en metal y madera se encuentran emparentadas con las obras de Sol Lewitt, pues juegan con el muro. A su vez hace una serie de esculturas inflamables que hacen sabedor al público del vacío a través del proceso de desmaterialización producido por el fuego, recordándonos así la concepción de Heráclito de la realidad.
(1986-1991) - Partituras y serie Privada
“Mi trabajo trata de hacer sensible la percepción. Esta cualidad consiste en ensamblar elementos que no presenten ninguna referencia con aquellos que ensamblamos en los sueños. En el sueño tenemos la capacidad de conjugar realidades nunca antes percibidas.”
Asdrúbal Colmenárez
La serie Partituras es resultado de la descontextualización y el cambio de escala de los rollos de una pianola que Colmenárez utiliza en forma plegada, los cuales asumen vida propia a través de un constructivismo que comienza a combinarse con un expresionismo gestual. El vacío se hace presente por la perforación, se acerca a la propuesta de Frank Stella por la irregularidad del cuadro, comienza a introducir la palabra como paradoja en su obra incluyendo frases de filósofos, se insertan las direccionales que entran y salen del cuadro que unen planos de colores. Se da así un paralelismo con la obra de Arakawa, quien juega con las interrogantes y los fenómenos perceptivos, buscando crear situaciones previas a la percepción, de ahí su concepto de Blank, que será la ausencia de cualquier fenómeno perceptivo.
Esta etapa se fusiona con Preludio y Errancias, donde se hacen presentes situaciones de equilibrio ilusorio, pero las piezas se encuentran soldadas, lo que consigue una circunstancia inversa al equilibrio que logra el artista Richard Serra con las placas de acero. Este proyecto se mostró en la instalación Preludio 7, Fuga 7 presentada en la Galería de Arte Nacional (GAN) en 1991, y parte de las esculturas se realizaron en talleres de la empresa de Aluminios de Caroní. La serie Privada, 1992, fue expuesta en Japón en la Galería Naito, junto a un conjunto escultórico a unos kilómetros de Tokio, en Miniyata. Estas piezas son una totalidad fragmentada, que busca unirse a través de la tensión visual que generan la irregularidad formal de las piezas, en ellas fusiona lo escultórico con lo pictórico, y lo gestual con lo lineal.
“La instalación de Colmenárez se basa en la línea, sea en un soporte o en el espacio y las formas en distintas dimensiones. La Línea puede ser agua o vacío… Así su espacio es activo y estimulante. El Preludio es la entrada, mientras que la fuga es la insistencia por alcanzar un objetivo.”
Palenzuela, Juan Carlos. Preludio, Fuga y Paradoja. El Nacional. Cuerpo C. 17-8-1991
(1991-1993) - Errancias y Mare Nostrum
En la serie Errancias de 7 mares se asocia al errar y la desorientación con el divagar interior del vuelo imaginario. Recrea cartas marinas y planos de barcos para transformarlos en elementos estéticos que derivan en la serie Mare Nostrum, expuesta en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber (MACCSI) en el año 1993, donde el artista nos enfrenta al océano como fuente de misterio, son mares que toman distancia de la realidad que se plasma en cuadros que buscan acercarse a la concepción de Kant de lo sublime como metáfora del mar desencadenado. La coherencia entre la escultura y la pintura evidencia un lenguaje plástico, estas esculturas en acero se realizaron en Sidor. En esta exposición el artista introduce al espectador en situaciones provocativas, como la del barco armado en el interior del museo, cuya parte exterior presentaba la patina del oxido marino y en el interior un impecable cuarto blanco, con un anuncio de neón con la frase que hiciera famoso a Sócrates «Conócete a ti mismo».
Estas obras son eco de su admiración por lo poetas malditos, y por las fuerzas desbocadas de la naturaleza, especialmente del poema de Rimbaud: El Barco Ebrio, que sirvió de inspiración a la serie Mare Nostrum, un fragmento de este poema delata la significación del mar para el artista, de manera paradójica Asdrúbal ama y teme a la mar, pues no sabe nadar, y su acercamiento al océano es ensoñado, soñado, poetizado, fantaseado más no vivido. Y es una de las causas del poder estético de esa serie, tanto en los cuadros como en las esculturas, donde se reta la gravedad, cómo lo hace la espuma marina en las crestas de las olas, al ser lanzadas al vacío.
¡Pero de verdad, lloré demasiado¡ Las albas son
desoladoras.
Toda luna es atroz y todo sol es amargo:
El acre amor me ha hinchado de torpe embriague.
¡0h, que mi quilla estalle! ¡Oh, que me hunda en el mar!
Arthur Rimbaud
1994-2000: - Narrativas
“Todo artista viene de algo y de alguien. No se pueden negar las influencias, porque es negar la historia del arte. Lo Importante es lo que se puede aportar en relación a lo que se ha recibido.”
Asdrúbal Colmenárez
Destaca la exposición titulada Transposiciones, en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber (MACCSI) en el año 1998, donde recrea lo que considera la historia de las artes visuales contemporáneas, tanto a nivel internacional como nacional y sus puntos de referencia en ella. Se da una de sus primeras exposiciones en la Galería Medicci Latencia Nómada, 1999, donde presenta obras caracterizadas por taxonomías de plantas, animales y cartografías exóticas. Es en Galería Medicci donde presentará desde ese momento sus diversos planteamientos estéticos.
2000-2012: + Narraciones
“Podría decir que el trabajo que realizo es una mezcla de constructivismo ruso con Dadá, que son completamente antagónicos. Porque para el constructivismo ruso se trataba de la razón y de la construcción de un hombre nuevo, (1) Y el Dadá es casi irracional, pues para este movimiento el mundo no tiene solución. Estamos ante una crítica perversa, pero la actitud de Dadá era honesta. Es importante saber que Duchamp produce el Urinario en 1919 al mismo tiempo que el cuadro blanco de Malevich, que son los extremos del arte moderno de vanguardia.”
Asdrúbal Colmenárez
En esta década el artista crea diversas series centradas en obras literarias básicas de la cultura occidental, este será el hilo temático, más no el estilístico, pues en ellas se generan ciertas rupturas como ocurre con la exposición Edipo Rey, laberintos del Ser, en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas (MACC) en el 2006. Donde presenta esculturas en las que introduce el plástico como un elemento integrante de su lenguaje, que confronta con materiales fuertes como el acero y madera, con lo blando de los polímeros; para crear la noción de alejamiento temporal y espacial, que la contemporaneidad tiene con respecto a sus mitos y tragedias fundacionales como Edipo Rey, y las obras de Homero la Ilíada y la Odisea. Donde evidencia su identificación con el ingenioso Ulises, recreaciones estéticas que transforma en metáforas de situaciones existenciales, que al ser desacralizadas acercan la Grecia antigua a la contemporaneidad. Sobre la base de estos temas crea varias exposiciones individuales en la Galería Medicci, en las que se van evidenciando las rupturas que su lenguaje plástico va elaborando. En estos años no sólo se limita a esta indagación visual de la literatura occidental de Grecia, sino al renacimiento italiano al inspirarse en la Divina Comedia de Dante, como escatología y a la obra del Marqués de Sade, al que dedica su serie Erotika, Galería Medicci, 2008, donde se hace patente el uso del collage, el dibujo de trazos rápidos y colores contrastes en un tema que el artista no había tratado sino tangencialmente.
“Lo erótico en su plástica no es nuevo como presencia, atmósfera, y energía; mientras que George Bataille (1862-1962) construye un monumento literario definido como extraordinario ejemplo de la novela gótica del siglo XX. Asdrúbal Colmenárez construye un monumento de gran riqueza y exuberancia visual que podría también definirse, al estilo Bataille, como gótico”.
Rodríguez Bélgica. La Erotika de Asdrúbal Colmenaréz. Galería Medicci. 2008
En el 2011 se realiza una colectiva en la Galería Medicci, como un homenaje a la contemporaneidad de su lenguaje plástico, titulada Re-Invenciones donde el objeto encontrado es el eje que une a los artistas y sus obras, donde participan: Isabel Cisneros, Aní Villanueva, Jesús Caviglia, Alberto Asprino, Luis Felipe Herrera y Luis Alberto Hernández.
Cita:
(1) Los artistas involucrados en la creación del hombre nuevo, retórica generada por la revolución Rusa, terminaron siendo excluidos y perseguidos como ocurrió con Vladimir Tatlin, proyecto El Monumento a la Tercera Internacional, 1919, que combinaba una estética de máquina con componentes dinámicos que celebraban la tecnología, como los reflectores y las pantallas de proyección; él termino haciendo decorados teatrales, y muchos de los restantes lograron huir...
Es curioso que el futurismo en 1909, había asumido dos grandes temáticas tocadas más adelante por el Constructivismo ruso: la máquina y el movimiento, y a su vez admiraban al fundador del Fascismo Benito Mussolini (1883-1945).
Eduardo Planchart Licea
Abril 2012
El arte debe concebirse como la vida misma,
tiene un riesgo permanente,
si transitas en el arte por un camino conocido,
te alienas.
El arte tampoco es una realidad fenoménica,
sino un cuestionamiento,
al igual que la filosofía.
Una obra no es importante que sea fea o bonita,
sino que llame a la reflexión y al cuestionamiento de uno mismo
y de la sociedad que nos rodea.
Ése es el fundamento conceptual de mi obra…”
Asdrúbal Colmenárez
Marzo 2012