PISCIS
Frank Hyder
Sumamente significativo y gratificante es presentar a un artista que constantemente ha estado muy unido a la naturaleza y a su relación con el hombre, con todo ese mundo por descubrir, con personajes, viajes y disputas y de la aventura que de irrumpir en ella se genera. En Latinoamérica, desde hace tiempo Frank Hyder, un artista norteamericano, ha establecido su vínculo con ese entorno que le derivó en una fascinación por los aborígenes, sus rostros y miradas cuestionadoras, chamanes, toda una iconografía selvática llena de resplandecientes matices, viajes de pesca o búsquedas en canoas imaginarias. En ese escenario, definitivamente Hyder se enlazó con un colorido mundo por descubrir que ha sido traído de un pasado apenas reciente y que desaparece a medida que el hombre moderno progresa y avanza.
Frank Hyder llega a Caracas por primera vez en 1991 y desde entonces ha sido persistente presentador de su creación que siempre ha estado vinculada a la relación que existe entre el hombre y la naturaleza. Su hacer y pensar ha recorrido museos, ferias y galerías en Coro, Mérida, Maracaibo y Caracas, siempre mostrando ese punto conceptual tan propio a través de las bondades de su depurada técnica y oficio en el manejo de los elementos de ese mundo primitivo que a través de sus personajes y entornos trata de mantener con vida.
Ya en 2001 decía Sofía Imber sobre el artista: “Hyder es sin duda un maestro, en la dimensión plural de la palabra, la que lo revela como aquel que busca las maneras de enseñar lo que se debe aprender. No pocas generaciones, talleres, se han nutrido de sus investigaciones, de su interpretación de los puntos de cruce entre las culturas y entorno natural y de la manera como los ha plasmado en materiales y conceptos, para contribuir a formar una conciencia y una sensibilidad más próxima, pero a la vez más universal, del mundo como hábitat del ser humano” Sofía Imber. “Recuerdos del Mundo Nuevo” Museo Jacobo Borges, Caracas, 2001-2002 .
Dos exposiciones individuales de Frank Hyder hemos presentado. “FACES” en el año 2003 fue expuesta también en nuestra localidad de Coral Gables, Florida-USA donde se mostraron rostros y escenas de aborígenes y chamanes en maderas talladas por el mismo artista, incorporando luego las virutas en pequeños ensamblajes que sorpresivamente se abrían como cajas o pequeños objetos con puertas. También utilizó sus “telas” fabricadas por él mismo de la fusión de papel seda, capas de acrílico y otros materiales naturales como hojas y diminutas ramas que fueron incorporadas como collage entre las capas dándole una textura única y muy particular.
Apasionado por lo aborigen y lo que emana del medio ambiente natural, vuelve en el año 2006 con la exposición “TIERRA LIBRE”. Nuevos rostros con miradas enigmáticas y hasta melancólicas de quien observa y enjuicia son testigos de ese mundo imaginario que permanece sumergido en lo autóctono, natural como el testimonio que nos deja José Pulido en el texto del catálogo: “He ahí a Frank Hyder pintando: puede ser sutil con un brochazo y abrumador con una pincelada. A sus personajes se les pone la piel de mimbre: la epidermis se les vuelve un encantamiento de madera tallada, de virutas y conchas, un enmascaramiento de bambú. Es un colorista que mueve sus tonalidades como viento en el follaje, como remolino en agua, como incendio en montaña” José Pulido. “Tierra Libre” Galería Medicci, Caracas, 2006 .
Esta vez, vuelve Frank Hyder con “PICSIS”, y con mayor ímpetu nos muestra peces multicolores que navegan en la calma de estanques donde el colorido y un suave pero constante movimiento guía los pequeños cardúmenes para invadir la serenidad de las flores de loto que el artista nos muestra en su mejor trazo. Es para el artista un nuevo ciclo que se desarrolla a plenitud donde añade una suave y brillante textura que cubre y enriquece aún más su trabajo estableciendo el sorpresivo e inevitable vínculo del veedor con la obra.
Tomas. Kepets
Caracas, 2011
