Karim ha incursionado exitosamente las técnicas de pintura y escultura, así como la fotografía y las artes gráficas.

Nace en Caracas en 1959.

Sus estudios iniciales los desarrolla en la Escuela de Artes Plásticas Cristóbal Rojas de San Cristóbal, Venezuela y prosigue su formación académica en la Escuela Cristóbal Rojas de Caracas, Venezuela, estos estudios abarcan el periodo de los años 1974 a 977).

Luego se traslada a París, Francia donde ingresa en la prestigiosa Escuela Nacional Superior de Expresión Plástica de Bensaçon, de la cual egresa en 1981. Posteriormente continúa su sólida formación artística en la Universidad de París (1982) y luego realiza una especialización en grabado y nuevas técnicas en el Atelier C. Marcano en Aviñón, Francia.

Desde 1983 establece su taller en París y viaja frecuentemente a Venezuela. En 1985 realiza su primera muestra individual en Espace Winstub (Bensaçon, Francia), en la que se inicia como retratista y ya en 1988 inaugura la muestra "Trace de l'Amérique Latine" en la Galerie Tendances Grises (París).

Mantiene su línea de trabajo y pronto le cautiva el universo de la masa pictórica pigmentaria, collage y pintura gestual. Poco a poco comienza a intervenir sus obras con trazos de escritura, a la vez que se va alejando de la figuración.

El artista, valiéndose de propuestas iniciadas por el expresionismo abstracto y el informalismo, desarrolla un discurso plástico donde prevalece un trazo y un gesto muy personal, su obra es eminentemente subjetiva: reminiscencias y trozos de elementos de la memoria. En algunas telas rompe el formato tradicional del bastidor para semejar pergaminos y cueros clavados o colgados que adentran al espectador en las interioridades de la obra. Tiene un repertorio amplio de técnicas y recursos como texturas, signos, grafitos, rasguños e incisos, que le permiten a sus creaciones escapar a la representación objetivista. De su obra, Carlos Silva escribió: "sus estratos de pasta pictórica se acomodan irregularmente, como la sedimentación que va dejando un proceso que nos habla de remotas eras geológicas, que dejan asomar, directamente, la ciega historia natural. Pero esa lengua de la materia, […] se ve acompañada por obsesivas líneas escriturales donde se difuminan mensajes que ya no testifican un autor […]. Todo ello parece devenir por sí mismo, los ajustes de las capas geomórficas y las delgadas franjas de palabras, de tal modo que Borjas actúa como el elegido para presentar, con singular maestría, la obra de otros, el trabajo de la naturaleza, la astronomía de las cosas, así como los inicios de un lenguaje que es repetido, borrado y reescrito y cuyos significados se han vuelto opacos con la historia" (2000). 

Borjas ha participado en numerosas exposiciones individuales, colectivas y salones nacionales e internacionales, asimismo, ha ilustrado libros de importantes autores como Pierres Trouves (F. Millot) y La grandilocuente historia del gigante Noctambul (Rafael Rodríguez Calcaño), entre otros.